martes, 19 de febrero de 2008

back from uru... con un poema

algo fue robado, o quizá haya algo
necesariamente inconcluso en la creación:
al que pintó aquellas nubes –por ejemplo-
le faltaron aquí y allá unas pinceladas

boca arriba, desde un lecho verde
un elegido podrá extender dos dedos
y en un guiño, tomar con su ojo abierto
una radiografía del paraíso

yo en cambio sólo sé elaborar
variaciones que son finitas
1, 2, 3 (cuatro...
pero no más)

sin embargo, una vida nueva
se desprende de cada variable
y hasta nacieron seres monstruosos
producto de mi intervención

incluso en completo silencio
mi mal no moriría... haría una siesta
basta decir que las cosas de la naturaleza
se distraen cuando no las miro

cae un bicho, una fruta, un papel

a mis espaldas, toda vida es eso:

una telaraña
que se desteje

7 comentarios:

Matchless dijo...

Inquietante tu nuevo poema. Empieza con una onda tan coloquial y tan como si tu tía te comentara la forma de las nubes que ve por la ventana de la cocina mientras descarga las bolsas de Carrefour. Pero mete el dedo en la llaga; faltan unas pinceladas. Pero a las nubes no les falta ni les sobra nada, para que les falte algo tendría que haber una idea-de-nube o una archi-nube o una Vanity Fair de las nubes y no hay; cada una es, y es porque sí, idéntica a sí misma en cada momento. Parménides y Heráclito reconciliados, "destejiendo telarañas", uno a espaldas del otro.

pablo_keyes dijo...

te juro que la nube que yo estaba viendo estaba incompleta, si hubieses estado al lado mío en ese momento hubieras dicho "tenés que escribir un poema sobre esto"

Matchless dijo...

Puede ser Pol. Pero me refería a que me parece que planteás la contraposición entre el Ser y el Devenir. Las nubes no son; devienen. No tienen una forma sólida, única, prevista y ordenada parmenídeamente; cambian, se mueven, se descomponen en nubecitas y se agrupan en nubarrones: le deben haber encantado a Heráclito.
Y tu imaginación de bichos, de frutas y papeles a tus espaldas también. Que Parménides haga sus radiografías.

pablo_keyes dijo...

si, claro...
lo que intentaba transmitir en el poema es el momento donde uno ve la naturaleza como un cuadro, una instantánea o, al menos como una imagen fija, perfecta...
pero dándole una vueltita de tuercas "poética" se me ocurrió que en ese momento el que observa descubre una falla o error y entonces eso justifica su "intervención" a través del poema... claro que se puede aplicar a cualquier otra expresión artística: la música, la pintura, el bricollage, la repostería...

Matchless dijo...

Hermosa la imagen de la "intervención" del poeta. Le pone lo que falta a la realidad para ser perfecta. Entonces no es ni Parménides ni Heráclito: es más bien aristotélico lo tuyo. La conjunción de mimesis y poiesis: mirar la realidad miméticamente pero construir una nueva poiéticamente. Pero la realidad misma es poiética: vos lo decís cuando situás a las nubes como pintadas (imperfectamente) por alguien. O sea que es una intervención sobre una intervención de otro, una metaintervención, una crítica. Y eso me conduce entonces que toda poesía es un subgénero de la crítica, no te parece?

pablo_keyes dijo...

puede ser, igual medio me perdí...

lo importante de todo esto es que me das una gran idea para el poema: donde dice "imaginación", lo voy a reemplazar por "intervención"...
en su momento me habían persuadido de que diga "imaginación", pero ahora me parece que me cierra mucho más así,
que opinás?

Matchless dijo...

Me encanta. Decir "producto de mi imaginación" es muy correcto gramaticalmente pero es parte del vocabulario cotidiano e impersonal. Decir "producto de mi intervención" es una figura retórica tuya, que requiere de un trabajo hermenéutico de quien lee, para articularlo con los sentidos del resto del poema y no por simple recurso al significado convencional. Es mucho más Keyes.